luego estuvimos todo el día intentándolo con ausencia total de peces, y salían las carnadas intactas, poco a poco el mar iba arreciando y cuando decidimos recoger volvió a suceder lo mismo, otras 2 picadas consecutivas a mi compañero y ami, donde nuevamente me sonrió la fortuna
con este doblete dábamos por concluido una jornada prácticamente redonda,